En una nueva edición de Doble Click, Ramón Ulloa conversó con Olga Toro, psicóloga de la Universidad de Chile y doctora en Salud Pública, sobre el relajo en las vacaciones y cómo cuidar la salud mental en este periodo.
En una nueva edición de Doble Click, Ramón Ulloa conversó con Olga Toro, psicóloga de la Universidad de Chile y doctora en Salud Pública, sobre el relajo en las vacaciones y cómo cuidar la salud mental en este periodo.
En una nueva edición de Doble Click, Ramón Ulloa conversó con Olga Toro, psicóloga de la Universidad de Chile y doctora en Salud Pública, sobre el relajo en las vacaciones y cómo cuidar la salud mental en este periodo.
Para iniciar la conversación, Toro explicó que uno de los efectos positivos de tomar vacaciones es que “las personas que toman regularmente sus vacaciones tienen un desempeño laboral de mejor calidad y productividad. Muchas veces en la discusión de que si la gente se toma vacaciones baja la productividad del país, los estudios demuestran que precisamente es al revés”.
En ese sentido, la psicóloga de la Universidad de Chile destacó que “uno de los elementos importantes del descanso es que cambiemos el modo en que está nuestro cerebro, nuestra mente, sacándola de ese modo de activación permanente, de ese estado de alerta que es el que habitualmente estamos en el año regular en el trabajo, en la escuela. Ese modo de activación que hace que la persona esté muy concentrada (...) hace que las personas tengan buenas condiciones para responder, pero menos condiciones para reflexionar y crear, el modo mental que necesitamos para poder ser creativos e innovadores, requiere un tono de menos activación”.
Por otra parte, hablando específicamente sobre el descanso en los niños y adolescentes, la doctora en Salud Pública afirmó que “muchas veces en las vacaciones se distorsiona demasiado el ritmo de sueño y se malinterpreta el poder tener unas horas más de sueño. Pero el estar alterando, por ejemplo, estar quedándose dormido después de las 2, 3 de la mañana (...) Lo que estás introduciendo es un trastorno del sueño y eso es muy nocivo porque además no estás respetando los ritmos naturales biológicos”. A esto, Toro agregó que “los niños y jóvenes deben tener actividad al aire libre, actividad en la naturaleza y relación con pares. Eso es lo que nos mantiene sanos como especie”.