Por seis días se extiende la gira del Papa Francisco por Canadá, que ha sido denominada en reiteradas ocasiones por el sumo pontífice como una “peregrinación penitencial”. En su viaje apostólico número 37, y ante una multitud de los pueblos originarios Primeras Naciones, Metis e Inuit, el representante de la Iglesia Católica pidió perdón por el mal que tantos cristianos" hicieron a menores indígenas en los internados y por la “indiferencia” de la institución religiosa.